Con el regreso de Gregor Blanco al lineup de los Tiburones de La Guaira, hace dos semanas y media, el equipo retomó ese rendimiento excelente con el que habían comenzado la temporada. Gregor exhibe ahora unos números impresionantes, quizá los mejores en su carrera de diez años en la pelota venezolana. Actualmente, el caraqueño se embasa en 19 de cada 40 oportunidades, además de que anota 9 carreras. Por eso, es líder en promedio de embasado y de anotadas en la liga, también de bases robadas, superando su record personal con 12. Todo esto entusiasmó a un equipo que a punta de bateo y pitcheo relevista, lograron ganar 10 de 11 juegos, 7 de ellos consecutivos.
La Guaira inició la octava semana del campeonato en el primer lugar de la clasificación y con un record de 24-17. Enfrento en días consecutivos a unos Cardenales de Lara por debajo del quinto puesto, con un lineup realmente temible que necesitaba trabajar con más tranquilidad para ser efectivo.
El martes, inició en la lomita quien en teoría había sido el lanzador más consistente del equipo. El norteamericano experimentado Les Walrond no pudo sacar ni un solo out a pesar de haber enfrentado 7 bateadores, 5 de ellos anotaron y de manera limpia. Impresionantemente, Tiburones remontaron el juego, hasta el punto que en el cuarto inning tenían las bases llenas, con el corredor de segunda representando la carrera de irse arriba. José “Cafecito” Martínez, conectó rolling entre tercera y short stop, y quien cubría esta última posición, después de agarrar la bola la lanzó a segunda base. La sentencia del umpire fue out. Con eso terminaba el episodio. Gracias a la tecnología, miles de fanáticos supieron que la decisión del umpire había sido la incorrecta, ya que el juego estaba siendo transmitido por televisión. Sin embargo, Luis Rodriguez no necesitó ningún tipo de ciencia para reclamar el erróneo arbitraje, al hacerlo sin conciencia y control, fue expulsado inmediatamente del juego. Atacando los Cardenales, Oswaldo Navarro conectó un gran slam que volvió a separar la pizarra por cinco carreras, que los litoralenses no pudieron superar. El final fue a favor de los barquisimetanos 12 a 8.
El miércoles, el lanzador abridor, también importado, recibió 5 carreras todas limpias en el mismo primer inning. Esta vez, era Paolo Espino, quien al menos sacó un out. En el tercer episodio ya el juego estaba empatado, la ofensiva del La Guaira está atravesando una etapa de extrema reacción ofensiva. Tiburones se fueron arriba, pero al igual que los abridores y el dia anterior, el bullpen volvió a fallar. Esta vez eran Kendy Batista y Enrique González, quienes con toda seguridad se puede afirmar que han sido los dos mejores relevistas del equipo, los que recibieron el daño de la derrota. Los salados se pusieron a una carrera de nuevo, pero no fue suficiente y cayeron por segundo dia consecutivo, 10 a 9.
Esta miniserie de dos juegos, se jugó por casi 9 horas, además de la acumulación de 39 carreras anotadas. Los abridores de ambos equipos sacaron 13 outs, 1 solo de los Tiburones.
Tiburones viajaron a Maracaibo con un bullpen cansado, además de la ausencia de Kendy Batista por molestias, Héctor Sánchez estaba siendo llevado dia a dia por un pelotazo y Luis Rodriguez fue operado, no jugará en lo que resta de temporada regular. Todas estas ausencias, con las dos derrotas de la semana, eran una idea perturbante que habitaba en la mente de los fanáticos guairistas.
Shairon Martis era el abridor, que se iba a enfrentar a Wilfredo Boscán en su última presentación de la temporada. Martis pasó del primer inning sin recibir carreras. Pero en el segundo no se salvó y después de un error de Rainer Olmedo con 2 outs, anotaron 4 carreras, obviamente sucias. La ausencia de Luis Rodriguez ya estaba pasando factura. La ofensiva salada estuvo casi completamente silenciada. Fue en el octavo episodio cuando anotaron su primera carrera, la única del juego impulsada por César Suárez. Para meter el juego en el congelador, Michael Torrealba permitió 3 carreras más que sentenciaron el juego. Águilas ganaron cómodamente 7 a 1 y La Guaira perdió el primer lugar de la tabla, mala defensa problema grave.
En el quinto juego y ultimo en Maracaibo, La Guaira salió con el estadounidense Zach Kroenke, quien salió del juego sin haber permitido una sola carrera limpia en lo que va de temporada. En el cuarto inning un rally de 5 carreras puso encima a los Tiburones, en su mayoría por cuadrangular de 3 carreras de Jamie Hoffmann. El pitcheo estuvo magnifico, con la actuación de 5 lanzadores, solo 6 aguiluchos pudieron embasarse, 3 de ellos por imparable. La defensa tuvo rol protagónico, con la presencia de Ehire Adrianza en el short stop la línea central se veía mucho mas solida. Los escualos ganaron 6 a 0 y se dividió en tierra gaitera.
El pitcheo tuvo un descanso importante. Además de que no lanzaron tantos torpederos como días anteriores, no hicieron muchos pitcheos. Eso es vital para el equipo, ya que enfrentaran el doble juego contra Caribes el domingo mucha más tranquilidad, tan solo a 7 juegos ganados de asegurar el record por encima de .500 al terminar la temporada.
Está demostrado que el bullpen necesita descanso… Ayer no parecía hacer falta Luis Rodríguez, pero es cierto; el papel que juega en el equipo no es solo defensivo sino ofensivo, sin duda es un bateador hábil y oportuno. Adrianza en el SS es muy bueno y batea mucho, solo eso me hace pensar en mantenerlo allí; no obstante yo en lo particular prefiero a Rojas como SS, es mas solvente.
Tiburones no se ha ido, está permanentemente moviendo sus piezas, esta semana próxima mostrará mas ajustes, veremos que ocurre.