Joe Carter puso su nombre en la historia

Esta vez vamos a recordar un poco del pasado. Inicio de la temporada de 1993. Un equipo de los Phillies de Philadelphia, que luego de que finalizaron de sexto lugar en el este de la Liga Nacional en el 92 (en ese momento solo existían 2 divisiones por liga, este y oeste) con un récord poco aceptable de 70-92, le dieron la bienvenida a peloteros como Kevin Stocker, que con solo 23 años cubrió el shortstop de este equipo y tuvo una excelente temporada de novato donde en 70 juegos y 259 turnos al bate, obtuvo promedio de .324, anotando 46 carreras y .409 porcentaje de embasado; Jim Eisenreich formo parte del Outfield bateando para .318, anoto 54 carreras y un impresionante Slugging de .808; y David West desde el bullpen como set up del cerrador Mitch Williams, consiguió en 86.1 innings, ERA de 2.92 y 87 ponches, promediando 9.1 K por cada 9 episodios, sin duda la mejor temporada de su carrera. Por el otro lado, están los Azulejos de Toronto, que consiguieron el primer campeonato de su historia en la zafra anterior. Ese equipo estuvo liderado por dos miembros del Hall de la Fama, Dave Winfield y Roberto Alomar. Además de estas estrellas, también contaban con los servicios de grandes bateadores como Joe Carter y Candy Maldonado, como a su vez Jack Morris y Jimmy Key hacían su trabajo desde el montículo. Sin duda alguna, un equipazo era lo que tenía el manager Cito Gaston, quien continuo siendo el manager de los Azulejos hasta 1997. Toronto, se reforzó a su vez de grandes jugadores también inmortales como lo son Rickey Henderson y Paul Molitor, este ultimo contó con una de las mejores temporadas de su carrera, que lo coloco en el segundo lugar en la votación por el más valioso de la Liga Americana, ganado por Frank Thomas. Los Phillies, iniciaron la temporada ganando 23 de los primeros 30 encuentros, y en ningún momento de la temporada tuvieron récord por debajo de .500 (lo más lejos que estuvieron del primer lugar fue a 0.5). Clasificaron por una diferencia de 7 juegos y se enfrentaron en la Serie de Campeonato a los Bravos de Atlanta, a quienes en 6 juegos derrotaron convirtiéndose Curt Schilling en el jugador más valioso de esa serie. Por otra parte, los campeones mundiales clasificaron con la certeza de que estuvieron 105 días en el primer lugar en su división, además de que fueron blanqueados en una sola oportunidad y el juego más largo de la temporada fue de 12 innings. Llegaron a la postemporada contra las Medias Blancas de Chicago, quienes también fueron eliminadas por el contrario en 6 juegos, el más valioso de Toronto, Dave Stewart. Entonces, llegaron a la anhelada Serie Mundial, que inicio en Toronto. Dividieron los primeros dos juegos en Canadá para enviar la serie al Veterans Stadium. En Philadelphia, los Azulejos ganaron los primeros dos encuentros para ponerse solo a uno del campeonato por segundo año consecutivo, pero un duelo de pitcheo donde Curt Schilling no permitió carreras hizo que la serie retornara al Skydome 3-2. En el sexto juego, los canadienses anotaron 3 carreras en el primer inning. Sin embargo, con la pizarra 5-1, Lenny Dykstra conecto cuadrangular de 3 carreras y con un hit impulsador y un fly de sacrificio los Phillies se fueron arriba en el séptimo inning. Abriendo el noveno episodio, Rickey Henderson recibió boleto y Devon White fallo con fly al left field. Luego le llego el turno a Paul Molitor, quien ya había dado jonrón en el quinto episodio, conectó hit hacia el centro del campo, elevando su promedio de bateo en la Serie Mundial a .447. Llegaba el turno del cuarto bate, Joe Carter. En ese momento bateaba .250 con un jonrón y 5 carreras impulsadas. Con la carrera de empatar en segunda base y la de ser los campeones mundiales en primera, Carter conecto la bola a lo profundo del left field para ganar el encuentro. Sin duda alguna, este fue uno de los momentos más emocionantes de la historia del beisbol, al menos de que sea fanático de los Phillies. Cualquiera se puede emocionar al ver este jonrón. La verdad es que se puede notar lo importante que es para un pelotero alcanzar un campeonato, más allá de los retos personales que cada uno tenga. Cito Gaston se convirtió en el primer manager en ganar dos títulos seguidos desde que lo hizo Sparky Anderson con la maquinaria roja. Esa fue la última vez que los Azulejos de Toronto asistieron a una postemporada. Desde ese entonces, solo han quedado una vez en el segundo lugar de su división, en el 2006. Joe Carter quizá no es inmortal como lo es Rickey Henderson o Roberto Alomar, quizá no tenga los números de Dave Winfield o Paul Molitor, pero algo que no me cabe duda, Joe Carter pasó a la historia y jamás será olvidado su batazo para ganar la Serie Mundial de 1993.

Información express

  • En la historia de las Grandes Ligas, en tan solo 10 oportunidades un juego de pelota ha finalizado con triple play, dos de ellos, sin asistencia. Uno de esos caso, fue el 23 de agosto de 2009, estaba Francoeur con los Mets de New York, contra los Phillies y su cerrador Brad Lidge, que después de salvar 48 juegos en 48 oportunidades el año anterior, falló en intento de salvamento esa misma temporada 11 veces. Con hombres en primera y segunda, con línea a segunda base (donde estaba Eric Bruntlett) consiguió el triple play sin asistencia agarrando el batazo, pisando segunda y tocando el corredor que venía de primera base. Esta ocasión no solo fue la última vez que un juego finalizó con triple play, sino que también fue el décimo quinto y más reciente triple play sin asistencia. Menos común aun, es un juego donde un equipo deje en el terreno al otro bateando para doble play, suceso que solo ha pasado dos veces en la historia. La primera fue bateando el inmortal Roy Campanella en el 56 y la ultima en el 73 cuando paso una curiosa jugada: Con bases llenas, rolling a segunda, sacan el out forzado en home, lanzaron de nuevo a segunda para sacar también el out forzado allá y el corredor que estaba en segunda aprovecho para meterse hasta la goma y darle la victoria a Pittsburgh sobre los Mets de New York.
  • Mike Stanton, de los Marlins de Florida, en sus cortos 21 años de edad, llegó a los 52 jonrones de por vida la semana pasada. En esta temporada, está a un estacazo de Albert Pujols en el liderato de la Liga Nacional. El bateador más joven en liderar el viejo circuito en esa estadística es Eddie Mathews con 47 en 1953. En aquel año Mathews era justamente un mes mayor que Stanton esta temporada, así que podría conseguir ese récord. Además, es el décimo segundo jugador con más jonrones a los 21 años. Se encuentra a solo 8 para meterse entre los primeros seis. A esa edad, el que más jonrones tiene es Mel Ott con 86, ¿por qué Babe Ruth no? A esa edad tenía 43 juegos ganados, efectividad de 2.11 y 285 ponches desde el montículo.
  • Bob Gibson en 1968 alcanzó un efectividad de 1.12, cifra que desde ese año no ha sido superada. Además, Gibson lideró la Liga Nacional con 13 blanqueadas y WHIP (porcentaje de hits y bases por bolas por inning pitchado) con 0.853. Logró nuevo récord en la historia de las Grandes Ligas, con 11 salidas de manera consecutiva lanzando como mínimo 8 innings y permitiendo una o menos carreras. En esa racha: 11-0, en 99 innings pitchados, 83 ponches, 8 blanqueadas y ERA de 0.27. Independientemente de los logros globales en su carrera, esa temporada lo puso en el Hall de la Fama.

Links de Numeritos y más:

El pase de diapositivas requiere JavaScript.

 

 

 

Anuncio publicitario

Un comentario en “Joe Carter puso su nombre en la historia”

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s