La Maldición del Bambino

Independientemente de lo buenos que hayan sido Willie Mays, Cy Young, Ty Cobb, Nolan Ryan o Hank Aaron, la gran rivalidad del beisbol va mas allá de sí mismo, llegando a protagonizar muchos de los momentos más increíbles y emocionantes que el deporte ha vivido, logrando paralizar dos ciudades y un país entero por ver a 20 peloteros ensuciándose el uniforme y lo mejor de todo, de generación en generación el espectáculo ha evolucionado y cada día se ve más garra de los peloteros porque el orgullo de su equipo va primero, la rivalidad Yankees-Boston.

Todo inicia con un cambio, que en verdad se podría que decir que fue una venta. Los Medias Rojas de Boston quedaron campeones en 1915, 1916 y 1918. Babe Ruth debutó con el equipo en 1914, pero no jugó mucho. Después en 1915 jugó su verdadera temporada de novato en la que tuvo record de 18-8 y participó en la Serie Mundial. En 1916 probablemente se hubiese ganado el Cy Young en esta época, fue líder en efectividad con 1.75 y en blanqueados con 9 (no recibió ni un solo cuadrangular en 323 2/3 innings pitchados). Al año siguiente volvió a tener excelentes resultados, ganando 24 encuentros. Es en 1918 cuando Ruth se convierte un bateador, a pesar de que participó en 20 juegos como lanzador (en los que ganó 13 juegos) y jugó en 72 encuentros en otra posición, ganando el primero de sus 12 lideratos de jonrones. Fue el ejecutivo inmortal Edward Grant Barrow quien lo convirtió en bateador. Quizá esta idea podría resultar descabellada al pensar que en 31 innings como lanzador en Series Mundiales solo permitió 3 carreras dejando una efectividad de 0.87, con 3 juegos ganados en 3 salidas. Esta súper estrella, uno de los mejores pitchers del momento, que había liderado ofensivamente en jonrones y Slugging dos años seguidos, y el jugador de mas potencial de todo el beisbol, fue vendido a los Yankees de New York por la cifra astronómica de 100 mil dólares.

El 3 de enero de 1920 fue cuando se produjo esta venta, y fue el 11 de septiembre de 1918 la última vez que las Medias Rojas ganaron un titulo de Serie Mundial. Desde ese momento comenzó la maldición del Bambino. Los fanáticos de las Medias Rojas se sintieron traicionados al conocer esta noticia, su mejor jugador fue traspasado a otro conjunto solo a cambio de dinero. Quizá gerencialmente puedes verlo como un buen cambio, el posible mejor jugador del beisbol no va a producir tanto como lo que estas recibiendo. 100 mil dólares era una enorme cantidad de dinero. Pero estoy 100% seguro que los fanáticos de Boston no pensaban así, le estaban quitando de las manos a quien le dio sus últimos dos campeonatos, y todo por el “cochino dinero” como dicen por ahí.

Ruth dio resultados inmediatos a New York. En 1920 lideró en jonrones con 54 (nuevo record), impulsadas con 137, anotadas con 158, Slugging con .847 (nuevo record) y OPS con 1.379 (nuevo record). Después en 1921 tuvo la mejor temporada que cualquier otro bateador ha tenido en la historia: 59 jonrones, 177 anotadas, 171 impulsadas, .378 de promedio de bateo, y una línea OBP/SLG/OPS de .512/.846/.1.359, llevando a los Yankees a su primera Serie Mundial. Si siguiera no parara, Babe Ruth es el mejor jugador de la historia y no temo decirlo. A los 26 años ya era el jugador con más jonrones de todos los tiempos. Hoy en día se quiebran records regularmente, pero Ruth no solo los quebró sino que los lanzo desde un edificio de 200 pisos. En 1927, con el mejor equipo de todos los tiempos, que contaba con seis futuros inmortales además del manager, estableció el record de más jonrones en la misma temporada con 60, lo que el aseguraba ser uno de sus records favoritos. Le dio seis campeonatos de la Liga Americana a los Yankees y tres títulos de Serie Mundial en las que bateo .326 con 15 jonrones y 33 carreras impulsadas. Un jugador de otro mundo que lidero en Slugging 13 veces, en impulsadas 6 y en anotadas 8 con un promedio de por vida de .342.

¿Fue este un buen cambio para Boston? No lo creo. 28 años después del último juego de Ruth con Boston clasificaron a la Serie Mundial, cuando eran liderados por Ted Williams quien estaba regresando de la II Guerra Mundial. Las Medias Rojas perdieron en siete juegos contra los Cardenales de St. Louis. 21 años después volvieron a la final, liderados por Yastrzemski y derrotados también en siete juegos contra St. Louis. Volvieron en 1975 cuando enfrentaban a la Maquinaria Roja, otro de los mejores equipos de todos los tiempos y se repitió la historia, fracasaron en siete encuentros. Pasaron 11 años más y uno de los momentos más catastróficos del beisbol fue protagonista. En el sexto juego de la Serie Mundial que Boston lideraba 3-2 frente a los Mets, llegaron al 10mo inning ganando 5-3 y retiraron los primeros 2 outs del episodio. Las Medias Rojas estaban a un solo out de quedar campeones por primera vez en 68 años y de quebrar la maldición del Bambino. Tres hits consecutivos pusieron el juego 5-4, un wild pitch del lanzador Calvin Schiraldi empató el juego a 5 carreras y con hombre en tercera base Mookie Wilson dio rolling a primera base, que de ejecutarse correctamente hubiese llevado el juego al inning 11, pero a Bill Buckner le paso la pelota por debajo de las piernas y los Mets los dejaron en el terreno. Después New York gano 8-5 en el séptimo y decisivo encuentro, manteniendo viva la maldición del Bambino. La temporada de 1999 fue especial. Los Yankees y Medias Rojas se enfrentaron por primera vez en la historia del beisbol en una serie de postemporada. La maldición siguió viva, los Yankees ganaron 4-1. A los 4 años se encontraron de nuevo en los playoff. Esta serie llego a 7 juegos y no solo eso bastó, sino que ese último encuentro fue en entradas extra. Por los Yankees, Roger Clemens y por las Medias Rojas, Pedro Martínez. Con un rally de 3 carreras en el 8vo inning New York empató a 5 carreras. El juego se fue a extra innings y se decidió en el 11, cuando Aaron Boone dio uno de los cuadrangulares más emocionantes de todos los tiempos. La maldición no había muerto.

Por segundo año consecutivo, la Serie de Campeonato de la Liga Americana fue entre estos dos equipos. Los Yankees ganaron los primeros 3 juegos y en el cuarto llegaron al 9no episodio lanzando el mejor cerrador de todos los tiempos, Mariano Rivera. Sin outs en la pizarra Bill Mueller conecto el hit que le dio el empate a su equipo. Después en el inning doce David Ortiz dio el jonrón más importante de su carrera, las Medias Rojas ganaron el encuentro. Al siguiente juego el “papi” dio el hit para ganar pero esta vez en el inning 14. Al siguiente juego Schilling tuvo una increíble pieza de pitcheo, mientras le sangraba un pie. Llegó el séptimo juego, de nuevo en el Bronx, pero esta vez Boston gano cómodamente con dos jonrones de Johnny Damon, uno con bases llenas. Pasaron 84 años, 10 meses y 17 días desde el momento en que Ruth fue traspasado a los Yankees hasta esa noche en el Bronx. La maldición del Bambino había muerto. Boston ganó cómodamente en cuatro encuentros frente a los Cardenales, 86 años después de su último titulo. La historia se repitió en el 2007, pero frente a los Rockies.

Es verdad que Boston rompió la maldición, pero miles de fanáticos murieron con menos de 86 años sin ver a su equipo quedar campeones, todo por la venta del mejor jugador de todos los tiempos.

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Escrito por: Ricardo Mathison http://bit.ly/r7ZJPB

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